Un te quiero se vuelve una bola de nieve
Querer estar solo se vuelve una bola de nieve
Estar contigo se vuelve una bola de nieve
Unicornios se vuelven una bola de nieve
Trabajo y trabajo se vuelve una bola de nieve
La traición se vuelve una bola de nieve
Correr se vuelve una necesidad
Round tras Round se vuelve una bola de nieve
El llanto es necesario
Paso a paso se convierte en una bola de nieve
El ayuno como opción
Las guitarras en la noche un placer
El mentiroso se convierte en la bola de nieve
Un porro interminable como el infinito
El cáncer es una bola de nieve
La lluvia en torrenciales
Tranvías congestionadas
Un trabajo miserable
Y las personas no colaboran
Tras el día a día, las noches y los amaneceres. La divinidad del estar y ser es incomprensible cuando te vuelves una maldita bola de NIEVE.