Una herida es una lesión que se produce en el cuerpo. Puede ser producida por múltiples razones, aunque generalmente es debido a golpes o desgarros en la piel. En los diversos tipos de heridas podemos encontrar la herida del ego y la herida del ser.
Una cicatriz es un parche de piel permanente que crece sobre una herida. Se forma cuando el cuerpo se cura después de una cortadura, un raspón, una quemadura o una llaga. Investigando sobre este tema, descubrí que... Existen 4 tipos de cicatrices, Eutrófica, Hipertróficas, Queloides, Atróficas. Pero creo que hay una mas.
¿Hay cicatrices que no serán visibles?
Pueden ser las cicatrices amorosas, muchas de estás no están marcadas en la piel, estás se marcan en el ser. Las cicatrices del ALMA. Y para lo que a mi concierne son las más dolorosas, este tipo de cicatriz, puede tratar años en sanar o no, a diferencia de las anteriores mencionadas, esta cicatriz no es fácil, nada fácil de sanar. Pueden venir de algún desamor, de alguna perdida. Incluso del mal uso del verbo, la palabra mal ejecutada nos pueden lastimar tanto, o incluso más que una puñalada.
Sin previo avisó, en la ventana del hotel donde me estuve hospedando, cerca del medio día, vino hacia mí la paloma de la respuesta. Está paloma siempre responde alguna inquietud. Le pregunté a mi paloma sobre las heridas y esto fue lo que me dijo:
"No hay una garantía absoluta de que nunca duelan de nuevo, ya que la mente y el corazón humanos son realmente complejos y sensibles a nuevos contextos"
Sin embargo, una herida bien sanada tiende a dejar siempre una cicatriz que, aunque visible, no impide seguir adelante.
Mi niñez vino consigo unas cuantas cicatrices, cicatrices que con el tipo sanaron, dejaron su marca y son esas marcas que al verlas me recuerdan las cosas por las que tuve que pasar. En el transcurso del tiempo pocas cicatrices fueron físicas, pero las cicatrices del ALMA fueron en aumento. Recuerdo una cicatriz por amor, aquel día en el que termino mi relación con una gran chica. Bueno, para ser sincero... De hecho recuerdo varias cicatrices por amor. Algunas cicatrices sin intención, y otras hechas con toda intensidad. Marcas hechas por la ignorancia de la adolescencia, los celos y nuestra poca experiencia en lo que se refiere al amor. Heridas hechas por el ego y el orgullo.
Se es necesario de mucha voluntad y amor propio, para sanar nuestro orgullo, más que sanarlo hay que erradicarlo de nuestro ser. Porque del orgullo vienen las peores palabras, estás palabras dejan heridas abiertas que tardaran en ser sanadas. Mientras no cicatrice la herida, seguirá y seguira doliendo. ¿Y tú? Inconscientemente no habrás sanado. Si no somos capaces de perdonar nunca podremos sanar.
"Estoy Orgulloso de las cicatrices en mi alma, me recuerda que he vivido intensamente' (Paulo Coelho) |
No hay cicatriz, por brutal que parezca, que no encierre belleza. Una historia puntual se encuentra en ella, algún dolor. Pero también su fin. Las cicatrices, pues, son las costuras de la memoria, un remate imperfecto que nos sana dañandonos. La forma que el tiempo encuentra de que nunca olvidemos las heridas. (Explicaciones no pedidas.)
Recuerdo una vez mi madre decirme: "No me dolió la patada, sino el burro que me la dió" Ojo por ojo y el mundo quedara ciego.